martes, diciembre 20, 2005

y si perduro?
que tan profundo que no roce el paraiso, el silencio
y el sabor tibio de las luces.
el reflejo del colibrì,
el asma,el orden de los dias.

de la sombra sin cuerpo de tanto crecer.
de tanto tocar. aullar y repetirse.

naufrago.

aplaudo el solisticio y el oxigeno
y el sueño de las aves en el espacio uniforme y soleado
de una lluvia sin color.
froté mis manos un marzo, que vino sin estepas
sin avisos.
claree mis ojos en un cielo sumergido en asperezas,

caer como caen las gotas.
estallar y naufragar.
volver.

restregarse esa vida hasta que muera.
callarse en los jardines. merodearse. hurgarse. descartarse.
prevenirse...
como se previene un nacimiento, una hoz o el martirio de la vecina que se queja
del gato que la supera en romances.
el cartel en la avenida yace firme en la pared,a tantos años y miradas,
aun grita su vieja despedida.

hay tanto lugar en mis ojos.

para nunca dejar de arrojarte. mundo

sábado, diciembre 17, 2005

como soñarte
roer buscar
,desmentirte.

no he visto el mirlo parado en tus costillas
hablando por tus ansias
rezando por tus caricias,
no he oido ese corazon tan cerca,
desconozco el sabor de tus deseos
si el lamento que parece morderte los labios
es tambien el temblor del silencio y de los fríos que abundaran
como pasos nocturnos, detras de tu vigilia.
si el calor que parece caersete por todo el cuerpo
es tan solo el cristal con que empañas tus alientos
o la prisa de ver sobre los hombros la señal
de la partida.

sábado, noviembre 19, 2005

sumergido en la calle, la ultima hora que pretendia soportar
arrancar del calendario como se abrillanta el limo en las tuberias;
aliviado, el resplandor livido de las viñas empaquetadas,
impacientes
despiden un vaho a mentira, a nombre,
a cascara antigua, a flor tardia que se desprende con la tarde,
descansa un sueño livido como desmayo,
y se satura las encias con risas en la mañana,
antes que las prisas le saturen de inmundicias,
y el halito se ennegresca,
como mi propia lluvia adhirio el silencio en las aceras,
como otros junios pasaron,
como otros diciembres vendran,
secuestro de una mirada el mimbre blanco y lo tiendo al sol, sin esperar
a que la mosca cruze por mi vientre le sonrio y
le despido del calor.

me sereno las sienes a dos dedos
y recomienzo,
desabrocho la calma y busco el semblante que propicio
el tumulto de estos vaso,resisto pensar que de cualquier manera, tibio o hinchado,
he de encontrarme dormido en unas horas,
para que pues la deriva si del otro lado hay la misma tierra, y el mismo brazo firme
que sujeta mi estomago.
cuidame: placer, de no perderte el rastro
el dolor, el sabor a diario nuevo
y el olor a manos sucias de barrerse la carne, de ultimar a horcajadas la sonrisa
y de intimidar a las horas con el desfiguro de cinco segundos
practicos de muina con la aurora
y este alarido que resulta de los cierzos
de los mezquites y el mezcal
salado de tanto guardarse en las alfombras,

jueves, agosto 25, 2005

un segundo,cuatro veces

en los glaciares de tu terciopelo bronceado, anidé como un tordo los alientos que me he guardado hasta contemplarte en tu desnudez, ahora, solo soy un pozo que supira cada cinco segundos el calor de tu tierra.


en la cera eterea de una vela sedienta de sueño,deposité las lagrimas, que como una arena incandescente fuiste dejando en tu primera velada, oscureciendo los restos de tu inocencia.

esperar, siempre que la danza entorna los humores de los cuerpos, solo basta esperar que una delicada paloma posea el viento que nos queda, atados como martires a la cruz que besamos en el centro incognito de nuestra oscuridad de seda.

encrespada en el sedaceo oceano de la sabana, resbala en el desiterro de las ropas como una pluma que se despeña por el aire, ligera, apenas vista en el momento de extinguir las luces.

martes, agosto 16, 2005

cada nueva sonrisa que conosco, es cada nueva espalda que se tropieza con mi suerte
en el patio las familias se cruzan
se reunen para festejarle la muerte a algun sobrino
y en la mesa se secundan el ansia que les
duele como hambre de cada uno,

me indigna el dolor maxilar por exceso de gente
y el perfume en los nudillos antes de acariciarle las encias a alguna
santa pared.

no percibo el sobrepeso de las denuncias cuando las limita su copiosidad
de buenos dias

disfruto en cambio de las horas fatuas en que el primero
se deja arrastrar hasta el medio del cinturon,
como diciendo: como callando tambien: ey! atiendan alguien se ha resbalado a proposito
tan solo para que le absuelvan la fetidez en las caderas!!

sábado, agosto 13, 2005

no, tal vez.

cada cual se sutura su infierno para no verse los demonios,
y anda uno calzado y surcido de nubes a las tardes que les niegan la paciencia.

siempre se satura uno el cielo para no guardarse un espacio en el corazon
de otra manera andaria uno sirviendose en bandeja el alma y los errores del espiritu.

no espero crecerme, no espero guardarme ni alcanzar el espcio ultimo
en mis baules, no protesto contra los ojos si no con el vuelo que me alzan,
ni siquiera con los hombros si no con el sueño que me complementan,
no supuro contra sus cabellos, si no con el fastidio con que los siembro,
el ardor con que los admiro en la lejania
como cabellos de trigo y como lagrimas de soles que no alcanzo a cubrirme.

no desespero, pierdo el tiempo.
no pierdo el tiempo, cambio la mirada.
no cambio la mirada, ansio.
no ansio, tiemblo,
no tiemblo, paladeo cada cafe desde la cama hasta el fregadero,
y cada grano de azucar es cada estiercol que me atesta,
y cada verano que me aturde, cada otoño que me olvida.