lunes, julio 10, 2006

leo como asediado
rostros semaforos
puentes cielos y banquetas
raices de tu cuerpo
que se apestan en la fila de excusas
inutiles y frugales, de papel,
que tome unas horas
ni siquiera una noche
para volver en mis entrañas
a la necesidad prifunda
que olvidaste tras la puerta.

pesa como insomnio `
[ tu adios, tu armonia
el siencio que me escupio tu ausencia
se pudre dulcemente
como el disparo que rompera
mi craneo con la insistencia
atroz de tu recuerdo